Historia de la mujer y el asesino

Esta es una historia que me contaron durante la etapa del master que me pareció muy curiosa. A ver si me decís quien tuvo la culpa:

Esto es un hombre y una mujer que decidieron casarse. El marido era un empresario que siempre estaba con negocios, viajando a multitud de sitios y que no prestaba atención a su mujer.

Ella fue capaz de aguantar durante 2 años pero, al tercer año, debido a la desatención de su marido, decidió buscarse una aventura con otro hombre. Siempre que el marido viajaba por trabajo, la mujer iba a visitar a su amante.


Resulta que una vez el marido sale de viaje y la mujer, como otras tantas veces, decidió irse a por el amante, después de pasar la tarde en casa de su amante, el marido la llama indicándola que en 2 horas estaba de vuelta a casa, que su reunión se había cancelado.

La mujer se levantó deprisa y corriendo muy nerviosa porque su marido iba a regresar y no la iba a encontrar en casa. Se vistió y le dijo a su amante que se iba a casa que su marido llegaba, a lo que el amante no la hizo ni caso. La mujer sale de la casa del amante hacia su casa y, resulta, que para llegar a su casa hay que cruzar un puente (es imposible evadirlo), encontrándose un loco con un cuchillo. La mujer pensó “si cruzo por el puente, este loco me va a matar”, así decidió buscar una vía alternativa.

Al lado del puente hay un barquero al cual le dice “Perdone, ¿podrías cruzarme al otro lado del río por favor?”, a lo que el barquero le contestó “Por supuesto señorita, son 20 euros”. La mujer extrañada le dice “mire, no llevo nada de dinero encima, por favor, ¿podría cruzarme y luego vuelvo con el dinero?, mi casa está al otro lado”. A lo que el barquero contestó “Si no hay dinero señorita, no la puedo cruzar”.

La mujer desesperada vuelve a casa de su amante y le dice que hay un loco en el puente y que el barquero no la deja pasar porque no le paga 20 euros. Quería que la llevara a casa o la prestase el dinero para cruzar el río. El amante contestó “Lo siento, no es problema mío”. La mujer llorando desesperada salió de la casa.

Volvía al puente cuando se acordó que en ese lado de la ciudad vivía un antiguo amigo suyo, eran íntimos, y decidió pasar por allí para ver si la podía ayudar. Llegó a la puerta de su amigo que muy contento de verla, escuchó con atención su historia. Cuando la mujer terminó, el amigo le dijo ” Esperaba mucho más de ti. No puedo ayudarte con este engaño, lo siento”.

La mujer estaba sola, desesperada, llorando, dentro de 1 hora iba a llegar su marido y ella no estaba en casa para recibirlo. Se iba a dar cuenta de que le estaba engañando e iba a suponer un gran problema para su vida porque, realmente quería a su marido.

La mujer llegó al puente, se armó de valor y decidió cruzarlo. Cuando llegó a la altura del loco, este la vio y le asestó una puñalada. Ella murió.

Y mi pregunta es: ¿Quién tiene la culpa de que ella muriera?, ¿el marido, la mujer, el loco, el barquero, el amante o el amigo?.


Victor Yoalli

This is me.